El verano ha comenzado oficialmente este lunes 21 de junio y con ello llega lo mejor: las vacaciones. Por ello, muchos españoles se desplazarán en coche para llegar a sus respectivos destinos.
Como es costumbre, la DGT ha desplegado todo su material para detectar las infracciones que se puedan cometer. Un año más, los que decidan utilizar el vehículo particular deberán andarse con ojo si no quieren algún que otro disgusto.
La DGT publicó la ubicación de los dispositivos, siendo el de la M-30 el que más “caza” a los no tan despistados. Sin embargo, ahora han desvelado los lugares en los que estarán colocados los cinemómetros durante la temporada estival. Según el organismo autónomo se utilizarán "distintos métodos y dispositivos en distintas ubicaciones: pórticos, postes, cabinas laterales, vehículos, trípode y de tramo”.
Si quieres evitar una amarga sorpresa este verano, ¡atento!
Los radares en los vehículos se refieren a aquellos que se instalan en los coches patrulla, los cuales los monitorean la Guardia Civil, por lo que pueden actuar, parados o en movimiento.
Existe también otro tipo, el radar de trípode, que tienen que ser operados por los agentes y se ubican en los laterales de la carretera. Es importante diferenciar que estos no son iguales a las cabinas de carretera.
Los radares de tramos tienen varias cámaras, las cuales sirven para saber cuánta velocidad ha alcanzado de media en un tramo, con ello, consiguen saber si han mantenido la estipulada.
Los radares de pórtico son los que se encuentran sobre señales o carteles en la carretera. Estos son muy comunes, que funcionan lanzando una señal, la cual rebota en los vehículos y es recibida de nuevo por el radar, de esta forma conocen la velocidad a la que se desplazan.
Las cabinas de carretera, junto a los radares en postes, están en los márgenes de las carreteras. A diferencia de los de trípode, estos funcionan de forma autónoma, es decir, no necesitan a un Guardia Civil. Existen dos tipos, por un lado están los anteriores, es decir, los que emiten una señal y la reciben de vuelta. Por otro lado se encuentran las de láser, que se tratan de haces de luz oblicuos, las cuales rompen los vehículos y en base a esto calculan la velocidad.