La vida sigue igual por el Jorge Garbajosa. El Inter Movistar ha arrancado el nuevo curso deportivo de la misma forma que finalizó el pasado: sumando un nuevo título para sus vitrinas. En esta ocasión, se trata de una nueva Supercopa de España, la décimotercera de su historia y la segunda consecutiva. Pero no estamos hablando de una Supercopa más. Es una Supercopa especial, sobre todo, por el rival que tuvimos enfrente.
Jaén Paraíso Interior nos esperaba en una nueva final, tras la que ganaron los andaluces al Inter allá por el mes de marzo en el WiZink Center. Por tanto, se trataba de una revancha moral que, por suerte, acabó con final feliz.
Gran inicio
A pesar de estar inmersos en la recta final de la pretemporada, el equipo de Jesús Velasco mostró un gran nivel físico. Así, el conjunto torrejonero se adelantó hasta en dos ocasiones en el encuentro. La primera, en la primera mitad, con un tanto de Solano, que no celebraba el gol por respeto al que es su ex equipo.
Gadeia, ya en la segunda mitad, ponía el 2 a 0 tras un pase perfecto de Ricardinho, lo que hacía indicar que la Supercopa viajaría, sin problemas, a Madrid.
Ricardhino celebró su continuidad en el Inter Movistar / Inter Movistar
Consiguió vencer en los penaltis a Jaén Paraíso Interior con un gol de Carlos Ortiz
Nunca se rinde
Pero Jaén parece que continúa en la misma línea que la campaña pasada, donde sorprendió a todos los aficionados al fútbol sala de nuestro país. A falta de 7 minutos para el final, Carlitos recortaría distancias tras un error defensivo de los nuestros y Ramón, cuando quedaban tan solo 59 segundos para la bocina final, empataba el choque y lo mandaba a la prórroga.
En el tiempo extra, se notó que las fuerzas, a estas alturas de temporada, escasean. Ambos equipos se dedicaron a sobrevivir, luchando por que el otro no marcase. Los penaltis parecían el mejor desenlace para una final que no falló a sus expectativas iniciales.
Unos penaltis de vértigo
En la tanda de penaltis empezó fallando Jaén Paraíso, mientras que Borja ponía por delante a los nuestros. Ricardinho, con mucho suspense, mantenía la ventaja de los interistas, que se perdería con el fallo de Pola.
Bebe empataba la contienda, antes de los penaltis decisivos. Jesús Herrero se convertía en protagonista al parar el quinto penalti de los andaluces, dejando en los pies del capitán, Carlos Ortiz, la responsabilidad de ganar un nuevo título. Y no falló.
El ‘23’ se aproximó con total confianza al balón, batiendo al meta de Jaén y sumando la décimotercera Supercopa de España en la historia del Inter Movistar.
Arranca la temporada y lo hace de una manera inmejorable para los nuestros. Ahora, toca pensar en el inicio de liga, que nos enfrentará, el domingo 16 de septiembre, al Naturpellet Segovia en el Pabellón Jorge Garbajosa. Una ocasión para celebrar el título.