La escuela infantil Tamaral estará cerrada hasta el próximo 22 de febrero por el alarmante número de contagios de COVID-19. Esta situación afecta a un centenar de familias y profesores. El cierre ha llegado después de varios meses en los que se han ido confinando algunas aulas. El PSOE ha denunciado lo que considera “el abandono de la escuela pública por parte del Ayuntamiento y el Gobierno Regional”, y ha recordado el derrumbe parcial del tejado del comedor del colegio Santa Catalina. 

"La instalación que ha sufrido daños durante la borrasca Filomena y que, un mes después, seguía parcheada con lonas que han acumulado agua con las lluvias y han provocado que la estructura ceda", comenta el partido. “Afortunadamente ha ocurrido de noche, sin que hubiera niños en su interior, pero es inadmisible que un mes después siga sin repararse el tejado y que dé lugar a situaciones de riesgo como la que ha ocurrido. Es una muestra más del mal estado de mantenimiento de nuestros colegios públicos y de un equipo de gobierno que sigue sin acometer las obras prometidas y sin adoptar más medidas de prevención frente a la COVID-19”.

Falta de personal y de medidas

El partido asegura que, desde septiembre, la escuela carece de personal de refuerzo para poder cumplir con los protocolos de prevención en centros educativos que marca la propia Comunidad de Madrid. De esta forma se encuentran con más de un centenar de niños de entre 0 y 3 años sin mascarilla y en grupos burbuja de 40 niños. Añaden también que, cuando se produce un positivo de un alumno o profesor, se procede a confinar el aula o la escuela pero no se producen rastreos, ni se les realizan test de antígenos o PCR a alumnos o profesores confinados, ni tampoco se reciben llamadas de los Centros de Salud para interesarse por su estado.