Habitualmente, según ha informado el hospital, el proceso tanto diagnóstico como terapéutico de los pacientes del Servicio de Hemato-Oncología Infantil, incluyendo los pacientes de cualquier modalidad de Trasplante de Progenitores Hematopoyéticos y Terapia Celular Avanzada (Terapia CART), requiere de la realización periódica de pruebas en las que es necesaria la utilización de anestesia, que hasta ahora implicaba el desplazamiento del paciente.

Con este proyecto, los profesionales de La Paz quieren mejorar un proceso que actualmente implica que, cada vez que se realiza un aspirado o biopsia de médula ósea, una punción lumbar o quimioterapia, el paciente es trasladado desde su habitación hasta la sala de procedimientos, en la Unidad del Dolor, ubicada en una planta distinta del hospital infantil.

Según los impulsores de la iniciativa, estos desplazamientos hacia un lugar alejado de su planta, sumado al tiempo de espera en vigilancia del paciente tras la administración de la anestesia supone un estrés reiterado para estos niños, así como un riesgo añadido para su propia patología, dada su condición de pacientes inmunocomprometidos.

Un problema que los Servicios de Anestesiología Pediátrica y Hemato-Oncología Infantil del centro madrileño han decidido solucionar con la puesta en marcha de esta iniciativa, de la que actualmente se han beneficiado ya más de 120 pacientes desde su puesta en marcha en octubre de 2020.

La Unidad del Dolor Infantil de La Paz atiende cada año a 1.500 pacientes pediátricos. De ellos, unos 100 sufren dolor crónico, 400 sufren dolor agudo y hasta un total de mil pacientes sufren dolor por procedimientos, un problema al que el proyecto "Anestesia a pie de cama en el niño con cáncer" busca dar solución.

En España, de acuerdo con los datos de la Federación Española de Padres con Niños con Cáncer, 1.500 niños reciben cada año un diagnóstico de cáncer, si bien la supervivencia a cinco años en niños de 0 a 14 años puede alcanzar hasta el 80%.

También este lunes, con motivo del Día Mundial del Cáncer Infantil, el Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas ha recordado la importancia del tratamiento de rehabilitación en estos pacientes para controlar y mejorar las secuelas físicas derivadas de la enfermedad.

Han recordado, por ejemplo, que los períodos prolongados en la cama pueden provocar atrofia muscular por lo que un apropiado de actividad física mejora su situación y su estado motor.

Otras secuelas físicas a tratar, dependiendo del tumor, son falta de coordinación, temblores, problemas de equilibrio, hipotonicidad y dificultades posturales. En casos de cáncer óseo que conllevan en algunos casos una amputación, la rehabilitación es crucial para la reeducación del proceso de la marcha.