Cuando comenzó la pandemia, tres fueron las reglas básicas para protegernos, en la medida de lo posible, de la Covid-19: manos desinfectadas, metro de distancia y mascarilla. Sin embargo, esta lista se ha ido incrementando según han ido pasando los meses. A día de hoy, ¿Cuáles son las normas que debemos poner en práctica para intentar mantenernos seguros de cara a Navidad?
Las 'emes' ya conocidas
Mascarilla: pese a las dudas y los cambios de opinión respecto a ellas desde Sanidad, ya se han convertido en un objeto tan cotidiano e indispensable como las llaves de casa. Salvo contadísimas expresiones y por respeto tanto a nosotros mismos como a quienes nos rodean, hay que llevarla siempre.
Manos desinfectadas: lavarse las manos en profundidad todas las veces que sea necesario al día también es una práctica esencial contra la COVID-19, ya sea con jabón o con un gel hidroalcohólico específico.
Metros de distancia: aunque a veces, como en hora punta en el transporte público, sea imposible, hay que mantener entre metro y medio y dos metros de distancia con cada una de las personas que nos rodean siempre que sea posible. Se trata de una medida básica por la facilidad con la que se llega a contagiar el virus en situaciones de cercanía.
Las nuevas 'emes': más ventilación, menos contactos y mantenerse en casa
Más ventilación: pese a que hubo cierto debate, la posibilidad de contagio por vía aérea y aerosoles es una realidad a día de hoy. Para prevenir esto, además de la mascarilla, ventilar es una gran herramienta. Para prevenir los posibles constipados, muchos colegios y administraciones están instalando filtros HEPA, que posibilitan un espacio libre de alérgenos. Pero en caso de no poder acceder a ellos, lo mejor es abrir las ventanas en la medida de lo posible.
Minimizar los contactos: reducir la red de contactos presenciales puede reducir, de manera considerable, la posibilidad de ser contagiado por el virus. Las restricciones en las celebraciones de navidad propuestas por el Gobierno central están generando mucha controversia entre quienes las apoyan, los que quieren endurecerlas y quienes, por el contrario, van a flexibilizarlas. En cualquier caso y como con todo aquello que toca dejar de hacer por responsabilidad social: ya habrá tiempo para recuperarlo con quien cada uno desee.
Mantenerse en casa: el hashtag #Quédateencasa se viralizó en los albores de la pandemia, pero ahora ha cobrado una nueva dimensión. Sin un estricto confinamiento, toca confiar en la responsabilidad individual y en que la gente no saldrá más allá de lo esencial. Sin embargo, las imágenes de fiestas clandestinas y aglomeraciones no son muy halagüeñas. Desde Soyde., recomendamos quedarse en casa siempre que sea posible pues, si todos cumplimos, habrá tiempo de sobra para recuperar esas salidas que ahora no están teniendo lugar. Pero, si no puedes quedarte en casa, ¡recuerda cumplir siempre las emes citadas más arriba!