El gobierno municipal implantó en octubre de 2018 la cita previa para realizar cualquier gestión relacionada con el padrón municipal, concretamente para la solicitud de volantes o certificados de empadronamiento. Esta medida creo bastante controversia entre los vecinos del municipio, ya que entendían que se trataba de una traba burocrática que demoraba en exceso el tiempo de espera, así como la gestión de un simple volante.

En su defensa, el consistorio municipal aseguró que esta iniciativa contribuía a la eficacia y la comodidad de la realización de estos trámites administrativos, así como la obtención inmediata de los mismos, pudiendo conciliar mejor su vida laboral o familiar evitado la espera,