Estimados lectores,
Como bien saben, este mes de septiembre se habrían celebrado las fiestas patronales en honor a la Virgen de la Consolación, patrona de Pozuelo. Por segundo año consecutivo la pandemia nos ha privado de ellas. Debo recordarles que el gobierno municipal decidió cancelar las fiestas por los datos de la epidemia, pero dichos datos mejoraron y tanto la alcaldesa como su equipo decidieron no rectificar.
En primer lugar, quiero dar las gracias a la Congregación Ntra. Sra. de la Consolación, de la que tengo el honor de formar parte, que organizó todos los actos respetando las medidas de prevención necesarias, consiguiendo que fueran un éxito. A todos los que colaboraron: gracias. Y gracias también a los vecinos de Pozuelo que, junto a la Congregación, dieron una gran lección de responsabilidad y demostraron que podríamos haber tenido unas fiestas seguras.
Los empresarios del mundo taurino llevan luchando dos años contra las medidas que se les han impuesto
Quiero hacer una mención especial a todos los trabajadores y empresarios del mundo taurino y a los feriantes, cuya actividad se desarrolla precisamente en las fiestas de las distintas localidades. Estas personas, olvidadas por los poderes públicos, llevan dos años ya sufriendo las consecuencias de no poder trabajar.
Todos ellos llevan luchando dos años contra las medidas que se les han impuesto, cuya consecuencia está siendo que muchos negocios se vayan a la ruina. En VOX les tenemos muy presentes, y por eso apoyábamos la celebración de las fiestas, aunque se hubieran introducido, por precaución, algunas limitaciones.
Solo me queda desear que el próximo año podamos disfrutar de nuestras fiestas plenamente, como las conocemos, sin estas dichosas restricciones. Concluyo reiterando mi agradecimiento a la Congregación Ntra. Sra. de la Consolación y a todos los vecinos de Pozuelo por su comportamiento ejemplar estos días.