La EMMD es todo un referente en la ciudad. Cerca de 500 alumnos/as dan vida a esta institución, que ha tenido que reinventarse ante el COVID-19, demostrando que no hay barreras para el arte; y durante los meses de confinamiento, ofreció todo tipo de alternativas y propuestas destinadas al disfrute de la cultura sin salir de casa, como clases de piano virtuales, sesiones de baile, batería de recomendaciones con las mejores bandas sonoras, montajes de diversas disciplinas, tributos y hasta un emotivo homenaje a las víctimas de la pandemia, entre otras alternativas que contaron con excelente acogida.

El nuevo y atípico curso arrancó en el mes de octubre, siguiendo todas y cada unas de las medidas establecidas por las autoridades sanitarias al objeto de garantizar el correcto desarrollo de las clases.