La Guardia Civil ha detenido ayer miércoles a cinco funcionarios de prisiones, de los que cuatro desempeñan sus funciones en el Centro Penitenciario Madrid IV de Navalcarnero, y el último se ha retirado del servicio desde esa misma cárcel en los últimos meses. Todos ellos están investigados por tráfico de drogas en el interior de dicha prisión madrileña. También se han detenido en la misma operación a otras 13 personas, entre familiares y reclusos.
La investigación, según ha informado la Cadena SER, dio comienzo en los momentos más duros de la Pandemia, cuando las comunicaciones con el exterior del penal estaban restringidas. A pesar de esa restricción, el organismo de Prisiones detectó que la droga seguía moviéndose en el interior del Centro Penitenciario navalcarnereño, lo que hizo levantar las sospechas, llevando finalmente a estas detenciones. Las diligencias previas apuntan a que estos funcionarios introducían la droga a cambio de alguna compensación económica. Los funcionarios detenidos se encuentran en dependencias policiales, y la investigación sigue abierta, sin descartar aún nuevas detenciones.
El Centro Penitenciario Madrid IV de Navalcarnero se inauguró en 1992
¿Cómo es el Centro Penitenciario Madrid IV por dentro?
El Centro Penitenciario Madrid IV, ubicado en la localidad madrileña de Navalcarnero, fue inaugurado en el año 1992 sobre un solar de más de 250.000 metros cuadrados, obteniendo un tamaño construido de más de 40.000 metros cuadrados. En el interior del mismo, hay 750 celdas principales, y otras 113 complementarias. Asimismo, dispone de los servicios básicos de atención y servicio al recluso, como comedores, servicio médico, baños e instalaciones deportivas. El complejo está ubicado en el Camino de Mancigordo S/N, al cual se accede desde la salida 27 de la A-5, y la parada de autobús incluida en su complejo es atendida por la línea interurbana 538, que hace el recorrido entre el Intercambiador madrileño de Príncipe Pío y los nuevos desarrollos de Navalcarnero, con varios servicios diarios pasantes por el penal en ambos sentidos.