Tan directo en el área como fuera del campo, Salva Ballesta fue el mejor goleador español en los inicios de siglo. Y no era una época sencilla para serlo. Raúl, Diego Tristán o Fernando Morientes fueron algunos de los nombres que marcaron a una generación, pero él, con su carácter y sus goles, firmó uno de los mejores momentos de los delanteros nacional.
Racing de Santander, Atlético de Madrid o Valencia disfrutaron de sus celebraciones con su tradicional saludo militar y, ahora, nuestro Móstoles URJC, lo tendrá en su banquillo. Salva Ballesta firma como técnico mostoleño por una temporada.
A sus 43 años, el ex futbolista asegura haber elegido Móstoles, sobre todo, “por la ambición que me mostró Roberto Rodríguez, el director deportivo, desde el primer momento”. Pero, más allá de la ambición, Salva no esconde la importancia de los valores en su decisión.
La honradez, la lealtad o el compañerismo son algunos de esos valores que le han hecho decantarse por el Móstoles y “no por equipos de mayor categoría con los que he estado en negociaciones”.
Adaptarse a sus jugadores
Una de las señas de identidad del nuevo entrenador se basa en que su equipo jugará en función a los jugadores que tenga. Así lo dejó claro en su primera rueda de prensa como técnico mostoleño: “tenemos que tener registros para todas las modalidades que podamos desarrollar”.
Un jugador, por muy joven que sea, si tiene capacidad, tiene talento y tiene calidad, Salva Ballesta no le va a cortar en la vida las alas
Su clave del éxito en este mercado veraniego para confeccionar una plantilla perfecta reside en la paciencia. “Roberto está trabajando mucho y muy bien. Queda mucho tiempo de mercado y, seguramente, los buenos jugadores vengan al final del mercado”, explicó el míster.
Importancia de la cantera
Móstoles cuenta con una de las mejores canteras futbolísticas de toda la región, un detalle muy importante para el propio Salva: “un jugador, por muy joven que sea, si tiene capacidad, tiene talento y tiene calidad, Salva Ballesta no le va a cortar en la vida las alas”.
Con canteranos competirá en uno de los campeonatos más complicados de toda la Tercera división. Sabe que “no va a ser un camino de rosas”, pero no duda en asegurar que “sí se le va a ver al equipo una capacidad de trabajo y una identidad de juego”.
Apoyo importante
Su andadura en el Móstoles no ha podido empezar de mejor forma: con el apoyo de uno de los estandartes del deporte local, Iker Casillas. “Que te apoye un profesional de la talla, de la profesionalidad de Iker, siempre se agradece. Muestra el interés que tiene por el club”, afirma Salva, que recibió el cariño del portero a través de las redes sociales al conocerse la noticia.
Felicidad y alegría. Eso es lo que siente Salva Ballesta ante un reto tan complicado como bonito. Un reto que empieza ahora y que lo hace de la mano de cientos de mostoleños, que no le dejaremos solo en esta andadura. ¡Suerte, Salva!