La Policía Municipal de Móstoles cierra 2019 con un balance positivo. Así lo interpreta el ayuntamiento de la ciudad, que ha publicado los datos del ejercicio anterior extraídos del registro del Centro Integral de Comunicaciones del cuerpo. Este recibió un total de 32.495 requerimientos, con una media de 89 llamadas diarias, cifras inferiores a 2018, concretamente, en un 1,58 %. De ellos, cerca del 20 % estaban relacionadas con movilidad y seguridad vial.
Además, los agentes municipales realizaron 215 detenciones durante el pasado año, 7 más que en 2018. El 20,93 % estaban relacionadas con la protección de las víctimas de la violencia de género. La Unidad de Violencia de Género y Protección Social recibió 96 órdenes de protección, lo que supone un 9,43 % menos que el año anterior.
En 2019, los agentes de la Policía Municipal realizaron 215 detenciones, 7 más que en 2018
En cuanto a controles preventivos de alcohol y drogas, en 2019, se realizaron 1.782 y 354, respectivamente. Más de la mitad de las pruebas de drogas, el 52,55 %, dieron positivo.
En lo que respecta a la seguridad vial, de los 1.489 accidentes registrados, la quinta parte se produjo por distracciones al volante (19,49 %). Hubo, además, 113 atropellos. Aún así, un año más, no ha habido que lamentar ninguna víctima mortal en las calles de Móstoles.
El Gabinete de Mediación, que trabaja para resolver conflictos entre particulares en aras de favorecer la convivencia ciudadana, consiguió un acuerdo amistoso la 1 de cada 2 solicitudes recibidas. En total, el Área de Mediación y Seguridad Ciudadana ha recibido un total de 684 solicitudes o sugerencias de diversa índole. El 86,70% han sido ya resueltas.
En 2020, la Policía Municipal impulsará la Escuela de Seguridad para ofrecer formación a la ciudadanía en materia de autoprotección y de mejora de la seguridad. Trabajarán, además, para reducir la huella medioambiental tanto simplificando los procesos de gestión administrativa en papel, como con la incorporación progresiva de vehículos con etiqueta ECO. El objetivo es que todo el parque móvil utilizado por los agentes sea de bajas emisiones.