El Ayuntamiento de la Comunidad de Madrid aumentó el número de plazas en los centros de acogida para personas sin hogar hasta su máximo histórico además de habilitar cuatro estaciones de metro a causa de Filomena, la nevada que invadió la capital e imposibilitó la libre circulación y movilidad durante varios días.

Antes de que la borrasca llegase a su punto máximo, el Samur Social, dependiente del área de Familias, Igualdad Social y Bienestar, realizó una labor de rastreo por todas las calles en las que informaban a las personas sin techo de la situación que se venía por delante, convenciéndoles de pasar el fin de semana a cubierto por la peligrosidad de permanecer en las calles.