Según han indicado desde el Ayuntamiento de Madrid a Soyde, el Tribunal ha considerado que las empresas que luchan contra las plagas “pueden concurrir por el objeto del proyecto mientras que el Ayuntamiento no ha considerado que estemos ante una plaga sino ante un problema de daño a la biodiversidad”.

El plan para atajar este problema propuesto por el Ejecutivo de Martínez Almeida era ambicioso y suponía un gasto de 2,9 millones de euros, IVA incluido, a utilizarse en un plazo de 23 meses iniciándose este octubre. 

Madrid es el municipio con más cotorras de toda España. En el censo que SEO Birdlife realizó en 2019 en la capital se localizaron 4.400 nidos de cotorras y su población se estima en torno a los 13.000 ejemplares, lo que supondría casi un 50 % de la población nacional. Su reproducción se ha detectado en todos los distritos de la ciudad, pero en tres de ellos destaca su presencia: Moncloa-Aravaca, Latina y Carabanchel. El lugar de nidificación mayoritario en toda la Comunidad de Madrid es el árbol, sobre todo, en cedros.

El crecimiento exponencial de la población de cotorra argentina y de Kramer en Madrid sitúa a estas aves como un peligro para los ciudadanos, no sólo por las enfermedades que pueden transmitir, sino por los riesgos que entrañan sus nidos en los árboles en caso de caída. Algunos de ellos llegan a superar los 100 kilos de peso.

Las cotorras argentinas y Kramer se han ido convirtiendo a lo largo de los últimos 30 años en un problema para la conservación de la biodiversidad en los parques y zonas verdes de Madrid y en un agente de riesgo para la población por la peligrosidad de caída de sus nidos comunales y de las ramas de los árboles que los albergan, así como una fuente constante de quejas de los vecinos que sufren las molestias ocasionadas por su comportamiento gregario.