Metro de Madrid contará con equipos desplegados en hora punta para controlar el aforo y los flujos de viajeros. Además, una vez determinado el aforo máximo, el suburbano procederá a bloquear los tornos de entrada y salida. Esta limitación en el acceso, que ha adelantado 'El Mundo', se llevará a cabo durante la fase 2 del Plan de desescalada y se comunicará mediante megafonía y pantalla.
Los controles serán tanto estáticos -bajadas y subidas a trenes- como dinámicos en tramos concretos. Actuarán en las líneas con más afluencia – 1, 2, 3, 4, 5, 6 y 10- y en secciones “como el tramo Méndez Álvaro-Pacífico (L6) y Latina-Ópera (L5)”.
Esta medida forma parte del plan de contingencia del surburbano madrileño para evitar contagios de coronavirus durante la desescalada. Dicho plan recogido por el diario de ‘El Mundo’ se adaptará a las distintas fases de la desescalada:
Fase 1: Metro regulará el acceso y gestionará el volumen de viajeros reforzando personal de seguridad y de estaciones, sobre todo en hora punta durante las mañanas -6,30 a 10 horas- y durante el mediodía -14 a 16 horas-. Dicho protocolo se desplegará en estaciones como Atocha Renfe, Ópera, Príncipe Pío, Sol, Moncloa, Méndez Álvaro, Pacífico, Conde Casal, Nuevos Ministerios, Avenida América, Gregorio Marañón o Tres Olivos, entre otras…
Fase 2 y 3: Mediante el uso de la tecnología ‘big data’, el suburbano realizará un seguimiento y en el caso de un exceso de viajeros, se limitará el acceso bloqueando los tornos. Durante la fase dos se realizará en algunas estaciones, mientras que en la fase 3 se espera que esta medida se realice en toda la red.
Metro espera un “notable aumento de los usuarios en las próximas semanas” -actualmente viajan 300.000 personas al día- y busca evitar concentraciones para que viajeros y trabajadores “cuenten con las mayores garantías de seguridad”, según recalca Transportes. El uso de mascarilla en el Metro de Madrid es obligatorio desde el pasado 4 de mayo.