El botellón sigue siendo una realidad en Madrid a pesar de las multas. El consumo de alcohol en la vía pública aumenta año tras año entre los menores de edad. Si en 2018 la Policía Local gestionó un total de 744 denuncias por este motivo a los menores de 18, en 2019, la cifra aumenta hasta las 927 infracciones. Un incremente del 25%. 

Además, entre los mayores de edad, el crecimiento es aún mas pronunciado. De las 28.999 denuncias que se produjeron el año pasado, hemos pasado en 2019 a 38.815 denuncias, un incremento del 74%.

Malasaña, epicentro del botellón

El barrio más afectado sigue siendo Malasaña. Las concentraciones de jóvenes siguen siendo un habitual por el barrio madrileño, sobre todo en verano y su punto más caliente es la plaza Dos de Mayo. En este lugar los jóvenes no necesitan moverse para poder adquirir alcohol pues los vendedores ambulantes se multiplican.