El mercadillo más famoso de la capital lleva más de 35 semanas sin abrir y los vendedores cada vez están más cansados de luchar por su apertura. En un documento enviado este jueves a las más de mil familias afectadas por el cierre, la Junta de distrito municipal Centro recoge las exigencias del Consistorio para poder reabrir.
Entre las medidas, se exige un máximo de 2.702 personas en todo el conjunto, con zonas acotadas y solo con la mitad de los comerciantes, es decir, 500 puestos de los 996 que componen el Rastro. Asimismo, “en caso de picos con afluencia masiva de clientes, se impedirá la entrada al recinto y estos deberán esperar fuera, de forma organizada y guardando rigurosamente la distancia de seguridad”, explica el documento enviado a los vendedores.
Respuesta a la manifestación del miércoles
En la Carrera de San Jerónimo, frente al Congreso, un centenar de vendedores ambulantes de la asociación El Rastro Punto Es se concentraron el pasado martes para pedir la reapertura de su fuente de ingresos. Denunciaban la actitud del alcalde, Martínez-Almedia, al que señalaban con sus pancartas y gritos como el responsable de que no hayan avanzado las negociaciones.
Almeida señalaba que es imposible reabrir sin en la condiciones anteriores al coronavirus, “porque el nivel de gente que acude cada al domingo al Rastro hace que no se pueda respetar ni las medidas de seguridad ni la distancia social”. Sin embargo, la portavoz de la asociación, Mayka Torralbo, explicó durante el acto que es un mercadillo al aire libre y que no se puede exigir “pasar un control para llegar a los puestos”.
Los comerciantes van a consultar las medidas propuestas por la junta y la someterán a votación a lo largo del fin de semana
Los puestos del Rastro deberán estarán separados entre ellos 1,5 metros. Igualmente, las aceras deberán estar libres totalmente para permitir el paso de los vecinos de la zona y de los compradores de las tiendas. No obstante, la portavoz del Ejecutivo municipal, Inmaculada Sanz, ha explicado durante la rueda de prensa posterior a la junta de Gobierno de esta semana, que son los comerciantes los responsables de que el número de asistentes no excedan el máximo.
Según la propuesta municipal que recoge el documento enviado a los afectados, los 500 puestos de cada domingo deberán estar distribuidos en zonas determinadas, como ha recogido El País: en la plaza de Cascorro, 81 puestos; en la calle de Ribera de Curtidores,190; en la plaza del General Vara del Rey, 82; en la plaza Campillo del Mundo Nuevo,120; en la calle de Carlos Arniches, entre las calles de Mira el Rio Alta y de Carnero, 16, y en la calle del Mira el Río Baja, entre las calles de Mira el Rio Alta y Carnero, 11.