Este verano suponíamos que iba a ser diferente, pero al menos nos iban a quedar las piscinas para paliar las altas temperaturas que alcanza nuestro país durante el verano. Sin embargo, tendremos que buscar otra forma de refrescarnos, porque este año no podremos acudir a las piscinas municipales, puesto que permanecerán cerradas y no abrirán hasta el año que viene si la pandemia del coronavirus lo permite.
Una difícil decisión que ha sido meditada y tomada por el Ayuntamiento de Leganés, que opta por la prevención, la seguridad y la cautela en un momento que es crucial en la pandemia. El riesgo de contagios y posibles rebrotes sigue estando, puesto que no existen datos oficiales que aseguren cuál va a ser el comportamiento de la Covid-19 en las próximas semanas.
El concejal de Deportes, Miguel Ángel Gutiérrez, ha señalado que “es un momento en el que nos jugamos mucho todos y nuestra ciudad debe seguir siendo un ejemplo de responsabilidad y precaución”. Además, ha tenido en cuenta el gran esfuerzo que están haciendo los ciudadanos del municipio, abalando el “camino que están recorriendo los vecinos y vecinas de Leganés de una manera intachable”.
El Ayuntamiento toma esta decisión para evitar dar un paso atrás en el duro camino hacia la nueva normalidad
El edil ha agradecido “la comprensión de la ciudadanía con esta decisión” y ha recordado que por seguridad y responsabilidad “debemos prevenir cualquier tipo de acción que nos pueda avocar a dar un paso atrás en este difícil camino a la nueva normalidad”.
Por este motivo, el Ayuntamiento de Leganés toma esta decisión tras sopesar el riesgo de masificación en días de mucho calor en los que, por norma, las piscinas de la ciudad alcanzan su máxima ocupación. Leganés cuenta con dos piscinas municipales al aire libre: La piscina de El Carrascal, encuadrada en la Ciudad deportiva Europa, y la piscina del barrio de La Fortuna.