“Cuando llamaron de la Fundación GAES para comunicarme que éramos uno de los ganadores, no me lo creía, porque, aunque fuimos uno de los finalistas no teníamos demasiados votos. Sabíamos que los ganadores serían elegidos entre los finalistas por un jurado, pero cuando me dijeron que nuestro proyecto era uno de los premiados no me lo podía creer”, recuerda Ángela emocionada sobre el momento en que fue conocedora de la gran noticia. Y es que, gracias a los 2.000 euros que supone la Beca Deportiva que ofrece la Fundación Solidaria GAES, esta handbiker va a concurrir el próximo 27 de abril en una de las citas más importantes de MTB y, como es habitual, estará acompañada de sus compañeros y compañeras ciclistas.

 

“Somos una pequeña familia y yo no llegaría hasta donde llego si no fuese por ellos. Yo tengo mucho dolor corporal, por lo que no puedo hacerme una tirada larga de kilómetros sin tener una ayuda, sin contar con alguien que tire de mí y que me apoye en mis aventuras”, explica Ángela, que debido a que padece fibromialgia, neuropatía periférica degenerativa en piernas, discopatía degenerativa en columna, estenosis del canal lumbar e hiperlordosis aguda ya no pedalea sobre dos ruedas. 

 

 

 

 

 

Los problemas de salud de nuestra invitada no han impedido que continúe planteándose retos deportivos y compartiendo su cariño con quienes la rodean, como nos confirmaba Susana, amiga de Ángela y miembro del CC Pedaladas por el Tourette. “Yo soy no soy de aquí y para mí ella es como una hermana”, sostiene esta gallega amante del ciclismo afincada en Pinto.

Esta energía de Ángela se traduce en una incansable lucha por hacer visible el Síndrome de Tourette a través del deporte, en concreto, mediante los retos, salidas y actividades que realiza la Marea Naranja en la que se ha convertido el club ciclista que fundó en Fuenlabrada junto a su marido, Fernando Garzón. El hijo mediano de esta handbiker, tiene Síndrome de Tourette y, Ángela inició su aventura en el club ciclista con el objetivo de difundir información sobre esta desconocida enfermedad al máximo público posible.

De hecho, todo lo recaudado en diferentes eventos que realiza el Club Ciclista Pedaladas por el Tourette se destina al equipo del Doctor Tiago v. Maia, que está realizando un estudio genético de la enfermedad en Lisboa. “Nuestra verdadera finalidad es que de una vez por todas el síndrome se conozca y que las instituciones españolas empleen dinero para averiguar sus causas y posibles tratamientos efectivos”, sentenció Ángela apoyada por Susana, que considera “inaceptable que se esté estudiando la enfermedad en Lisboa con familias españolas”.