La Comunidad de Madrid podría tener presupuestos en 2021…si Vox quiere. Partido Popular y Ciudadanos ya dibujan las líneas estratégicas para unas cuentas que, previsiblemente, estarán muy marcadas por el Covid-19. Ambas formaciones han llegado a un acuerdo tras dos prórrogas consecutivas, en 2019 y 2020. Pero, pese al esfuerzo para alcanzar un entendimiento, lo complicado empieza ahora.
Los esfuerzos del ejecutivo autonómico pueden quedar en papel mojado si Vox no brinda su apoyo, ya que la suma PP-Cs es insuficiente. Esta tarde se inician las negociaciones con el que es su “socio preferente”, en palabras de Díaz Ayuso.
No es el momento de obcecarse con líneas rojas e intentar hacer política e ideología de esto
Una negociación desde cero
La negociación entre los tres partidos empieza “desde cero”, por lo que “queda todo abierto”, aunque Ayuso sostiene que también negociará “con el resto de grupos de la Cámara”.
“Siempre he sostenido lo mismo: primero quiero la confianza de Vox para sacar a los presupuestos y luego, por supuesto, que todo organismo que se demuestre que efectivamente puede reducirse, así se hará, no sólo por este compromiso con Vox sino porque creemos en ello como gobierno liberal”, defendía la presidenta. Un guiño a una de las proclamas de Vox, basadas en la reducción de cargos de confianza, asesores, políticos y “colocaditos de los partidos”, según Monasterio.
La buena predisposición de Ayuso a entablar negociaciones con Vox no sorprende, por lo que todas las miradas estaban puestas en el vicepresidente regional, Ignacio Aguado, que ya durante las negociaciones previas a la investidura se ha mostrado prudente en sus gestos de simpatía hacia Vox. Aguado ha aseverado que llega a las negociaciones sin líneas rojas, ya que asegura “no es el momento de obcecarse con líneas rojas e intentar hacer política e ideología de esto”.
Está por ver si la Comunidad de Madrid es capaz de sacar adelante unas cuentas vitales para una de las regiones más golpeadas por la pandemia.