La menor gravedad de la infección por la variante Ómicron y su mayor contagiosidad ha propiciado un aumento exponencial de los casos en un corto periodo de tiempo, cuyo manejo se ha desarrollado fundamentalmente en la Atención Primaria. Desde CSIT Unión Profesional, denuncian que los centros de salud de la Comunidad de Madrid "están colapsados" debido a que una gran parte de la actividad que se ha desarrollado en ellos no está justificada por la necesidad de atención clínica de las personas infectadas, sino por la actividad burocrática que supone la gestión de las bajas a los infectados.
Bajas y altas laborales
En Televisión Digital de Madrid, hemos hablado con el portavoz del sindicato médico del CSIT (SIME), José María Molero, para conocer la situación actual de nuestra Atención Primaria. Las autoridades han anunciado “un nuevo procedimiento para tramitar simultáneamente las bajas y altas laborales de aquellos ciudadanos asintomáticos contagiados de Covid-19”, pero el sindicato lo considera insuficiente. "La mayor parte de la actividad burocrática que estamos desarrollando de bajas laborales es con personas que han tenido síntomas", puntualiza el portavoz.
Al excluir a los pacientes sintomáticos de esta posibilidad de gestión automática de la baja y el alta, estos pacientes van a requerir al menos dos consultas con su médico de familia para gestionar su baja laboral/incapacidad temporal (IT). "Si en un mismo procedimiento pudiéramos gestionarlo todo, ahorraríamos esa segunda visita", añade Molero.
Molero nos traslada también que "no se han reforzado suficientemente las Unidades de Atención Covid (UACov) con personal facultativo para que puedan asumir la tramitación de las bajas laborales". "Estamos asumiendo una carga de trabajo que, en principio, debería derivarse a estas unidades", asegura el portavoz del SIME.
Medidas efectivas para descongestionar la Atención Primaria
En estos centros, las agendas de los profesionales, principalmente de los médicos de familia, ya estaban saturadas y este exceso de actividad acabó colapsando la Atención Primaria a partir de la tercera semana de diciembre. José María Molero tiene claro los pasos que deberían seguirse: "tenemos que adaptar cómo funcionamos y cómo trabajamos". "Hay que potenciar las Unidades de Atención Covid con profesionales para que los pacientes asintomáticos no acudan a los centros de salud", detalla.
"Tendrían que modificar el tema de las bajas laborales/incapacidad temporal (IT). Tramitar la baja al mismo tiempo que el alta tiene que seguir haciéndose también para los sintomáticos", cuenta José María Molero. "No es necesario que tengamos que imprimir en papel las bajas porque se pueden consultar a través de herramientas telemáticas que tienen las empresas. Esto evitaría que la persona se sienta presionada", comenta.
Los centros de salud ya estaban saturados, pero este exceso de actividad acabó colapsando la Atención Primaria - CSIT
Enumerando medidas efectivas para descongestionar la Atención Primaria, José María Molero asegura que "se debería intentar reforzar las plantillas de los centros de salud". "Hay una normativa que, desde el año 2020, establece que pueda haber una movilidad de recursos de un ámbito hacia otro. Médicos de familia, enfermeros, celadores, administrativos...fueron trasladados desde los centros de salud a IFEMA para reforzar la atención hospitalaria porque había muchos ingresos. Ahora que sabemos que es una ola con menos ingresos hospitalarios, este personal de refuerzo que se contrató al principio de la pandemia deberían reforzar los centros de salud", dice Molero.
"Con esta sexta ola, deberían haberse desviado más contratos hacia la Atención Primaria porque es donde está el grueso de la actividad", comenta el portavoz. Por eso, desde CSIT Unión Profesional vuelven a reclamar a la Consejería de Sanidad medidas efectivas que permitan a los profesionales dedicar tiempo a los pacientes que demandan asistencia sanitaria, por Covid o por otros motivos, que realmente requieren una atención clínica.
Polémicas declaraciones de Isabel Díaz Ayuso
Hemos preguntado a José María Molero sobre las polémicas declaraciones de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en una entrevista en ESRadio, en la que anunciaba una investigación en los centros de salud porque "no cogen los teléfonos, se cuelgan, de repente no hay médicos…". Ayuso señalaba que "se ve de manera más recurrente cómo en algunos centros de salud, no en todos, empieza a haber mucha tensión".
El portavoz del SIME comenta que "son unas palabras desafortunadas que han tenido consecuencias". "En el momento en el que se dicen esas palabras, se está cuestionando la actuación profesional. Estamos viviendo una situación de mucha tensión. Inmediatamente después de aquello, se produjeron incidentes en los centros de salud de cierta incomodidad por parte de los pacientes", cuenta Molero.
José María Molero declara que "el acceso telefónico lo determina la Consejería de Sanidad y la planificación de los recursos también lo establece. Ahí podían ser más generosos a la hora de contratar refuerzos porque no existe en ese grupo profesional escasez". "Si realmente necesitan recursos humanos que atiendan el teléfono, deberían reforzar los centros de salud. Creo que es poner sobre la diana a trabajadores que realmente están dando, desde el principio, todo lo que podemos dar, hasta el límite", puntualiza el portavoz.
"Estamos viviendo un escenario continuo de citas forzadas, tenemos agendas por encima de los 50, 60 o 70. Detrás de la llamada que se coge por parte de una unidad administrativa, tiene que haber una disponibilidad de hueco y no la hay", expresa Molero. "La presidenta debería analizar por qué está ocurriendo esto, por qué no hay profesionales para atender a la población que lo necesita y por qué no hay suficientes puestos desde las unidades administrativas que puedan atender al paciente. No podemos intentar que en una situación excepcional de incremento de la actividad, prácticamente no se hayan modificado los recursos", concluye.