Tras este proceso electoral quiero compartir mis primeras impresiones.

En primer lugar, quiero transmitir la admiración y reconocimiento que me genera y merece el gran trabajo desarrollado por todas las compañeras y compañeros de Podemos e Izquierda Unida en Alcalá de Henares durante esta campaña electoral.

Todos los que habéis estado a pie de calle, en las mesas informativas, haciendo llegar a la gente nuestras propuestas y programa. Los que, cubo y escoba en mano, habéis pegado carteles llamando al voto a Unidas Podemos IU. A los que, mediante las redes sociales y en persona, habéis explicado y argumentado a vuestras amistades y familiares el voto a UP. Y, sobre todo, a todas aquellas personas que durante la jornada electoral han dedicado el día a ejercer de apoderadas de UP en los colegios electorales de Alcalá de Henares, colaborando y ayudando para que nuestros vecinos y vecinas ejercieran el derecho al voto sin problemas.

Quiero dar las gracias a los 7.017 votantes de Unidas Podemos en Alcalá de Henares por la confianza puesta en nuestra candidatura.

El resultado electoral ha sido muy malo y no hemos cumplido nuestros objetivos. Si bien es cierto que hemos mejorado ligeramente los resultados autonómicos de hace dos años, no sólo no hemos evitado que el PP siga gobernando en la Comunidad de Madrid, sino que además seguimos muy lejos de referenciarnos como la alternativa a las políticas de derechas.

Ahora no podemos caer en discursos autocompasivos echando la culpa a los votantes por no reconocer nuestro trabajo. Ahora hay que hacer autocrítica, debate y análisis franco y sincero, porque es evidente que hay cuestiones en las que como organización nos estaremos equivocando y deberemos corregir.

Hoy, el día después de las elecciones, miles de personas siguen sin poder ejercer su derecho al trabajo, su derecho a tener una vivienda, su derecho a tener mejor transporte, servicios sociales, educación y sanidad. Por todos ellos no podemos dedicar demasiado tiempo a lamernos las heridas y debemos seguir luchando para que los derechos humanos sean una realidad en nuestro país, para que las condiciones de vida de las familias trabajadoras mejoren sustancialmente, anteponiendo los intereses de la mayoría social al de las grandes empresas.

Nos volveremos a levantar, como hemos hecho tantas veces en esta trinchera infinita. Seguiremos luchando pues nuestra conciencia nos mueve, sin andarnos por las ramas y buscando la raíz de los problemas, siendo sinceros y honestos con nosotros mismos y los demás.

“Me he convencido de que aun cuando todo está o parece perdido, es preciso reanudar tranquilamente el trabajo, recomenzando desde el principio.” – Antonio Gramsci