Amanda Avilés

@AmandaCoconutt

Tres años. Ese es el tiempo que lleva de andadura el Encuentro de Cine Solidario y de Valores, organizado por la UAH-Universidad de Alcalá y ACIVAS (Asociación de Productores y Distribuidores de Cine Solidario y Valores) en colaboración con CINESA y EGEDA (Entidad de Gestión de Derechos de los Productores Audiovisuales). Un proyecto que, este 2021, celebra una nueva vuelta al Sol, de nuevo, con sus Premios CYGNUS (entregados, este enero, en el Paraninfo de la UAH), y creciendo y llegando, en cada edición, a más y más público.

Una programación de varios meses que cuenta con exposiciones, mesas redondas, charlas y conciertos, entre otras actividades, y que se congrega en el Instituto para el Estudio y el Desarrollo de las Artes y las Ciencias Audiovisuales (CIMUART) de la Universidad de Alcalá, creado para la investigación, estudio y difusión del lenguaje y la comunicación audiovisual en todas sus facetas.

Así nos lo cuenta José Raúl Fernández del Castillo Díez, delegado del rector para Cultura y Ciencia y director adjunto en la Fundación General de la UAH. Hablamos con él para conocer en profundidad este proyecto y acercarnos a los motivos por los que la enseñanza y la industria cinematográfica decidieron unir sus fuerzas allá por 2018.

Traspasar la tarima

Esta apuesta por el cine de valores, nos cuenta José Raúl, viene motivada por que la universidad cumpla sus funciones fundamentales. “Se nos conoce muy bien por la docencia y la investigación, pero las universidades tenemos tres misiones, y la tercera es la de la formación cultural”, explica. Fernández del Castillo alude, aquí, a que es importante entender que el concepto de cultura no se basa, solo, en novelas. “La cultura que se nos propone es la que forma al individuo en aquellos aspectos que les permiten enfrentarse, con espíritu crítico, a los problemas que tenga la sociedad en un momento concreto”. En otras palabras, “correríamos un grave peligro si sesgáramos la cultura a la que se consumía hace 40 o 50 años”, dice. “Las modernas generaciones han tenido como fuentes de inspiración otros medios distintos del libro, además del libro, al que nunca le quitaría su valor”.

Una definición que lleva a entender esta sinergia y el nacimiento (y continuidad) de este Encuentro de Cine Solidario y de Valores, ya que es fundamental comprender que el mundo ha cambiado, y también sus formas de expresión. “Desde la tarima, muchas veces, un profesor ya no es capaz de trasladar un mensaje”, confiesa José Raúl, “pero hay otros canales, especialmente, el mundo audiovisual”. Ampliando el concepto de acceso a la cultura a estos nuevos canales, “vamos a ver que estas nuevas generaciones sí demandan cultura, y que, quizá, lo que ya no les resulta cómodo son los canales tradicionales”. En definitiva, “se demanda una cultura más predigerida, más inmediata y audiovisual”.

Tanto es así que, aunque el I Encuentro de Cine Solidario y de Valores solo duró una semana, “la Industria y el público nos demandaron más”. Ahora, lo difícil es poner el límite. “El problema es dosificarse -en las actividades-, hay muchas posibilidades y podemos morir en el intento”, nos dice, entre risas, José Raúl.

Necesidad del ‘like’

Como imprescindible en el programa de este año, la visita a la exposición 'La cultura audiovisual en los años 80. Referentes de la Generación X en España', disponible hasta el 7 de marzo en la Capilla San Ildefonso de la UAH. Una muestra que nos plantea una duda que le trasladamos a nuestro entrevistado: ¿cuáles serán los referentes de las siguientes generaciones? José Raúl teme “no tener la respuesta correcta”. “Hace 30 o 40 años, era fácil que una generación estuviese marcada por los ‘mismos hitos’”, pero ahora no es tan sencillo.