Cada vez son más las piscinas privadas que se construyen en la Comunidad de Madrid, y es que, si no estamos atentos, pueden convertirse en un peligro para los niños pequeños.
Según un estudio coordinado por el Hospital Sant Joan de Déu, se analizó los episodios de ahogamiento atendidos en 21 hospitales de España durante dos veranos de 2009 y 2010. Como resultado, se obtuvo que el 60% de las víctimas eran menores de seis años y más del 70% no sabían nadar ni utilizaban flotador cuando sufrieron el ahogamiento. Además, en ocho de cada diez casos los adultos admitieron un descuido en la vigilancia.
En los últimos 10 años, los casos de ahogamientos se han disparado, llegando incluso a multiplicarse por tres, según fuentes del INE. En el año 2016 fallecieron 458 personas en España a causa de ahogamientos. El 41,7% de los fallecidos tenían entre 65 o más años, pero también hubo cinco casos de niños menores de 10 años que fallecieron en piscinas.
por otro lado, los casos de hospitalizaciones se disparan: casi una de cada tres personas hospitalizadas por ahogamiento es menor de 14 años, y en muchos países los ahogamientos son una de las tres principales causas de muerte por lesiones no intencionales. Añadir que la mayoría de los accidentes mortales se producen en aguas naturales, como playas o lagunas.
El SUMMA 112 atendió durante el año 2019 a un total de 56 personas por ahogamientos en piscinas y en el medio acuático en la Comunidad de Madrid y la mitad de estas situaciones se produjeron, como es lógico, en los meses de julio (18 intervenciones) y agosto (10 intervenciones).
En ocho de cada diez casos los adultos admitieron un descuido en la vigilancia.
Andalucía (17%), la Comunidad Valenciana (17%), Cataluña (14%) y Castilla León (7%) son tradicionalmente las comunidades con mayor porcentaje de fallecimientos en niños de menos de 14 años de edad por dicha causa.
10 consejos a tener en cuenta con los niños durante el baño
- El niño siempre debe estar compañía de un adulto y vigilado.
- Usar manguitos o un chaleco flotador, adaptado siempre al tamaño del niño y correctamente colocado.
- Extremar la precaución con bordillos, escaleras y toboganes.
- Respeta la digestión, no debemos entrar en la piscina inmediatamente después de comer.
- Evitar lances de golpe en la piscina.
- Recoger los juguetes y flotadores que se introduzcan en la piscina.
- En otros lugares se aconseja vallar las piscinas para evitar caídas al agua de niños.
- Enseñar al niño a mantener la calma en el agua y acostumbrarle desde pequeño a ella.
- Cuando sea lo suficientemente mayor, enseñarlo a nadar.
- Si la zona es natural, extremar las precauciones y acompañar siempre a los más pequeños (deben ser aptas para el baño y contar con bandera verde en el caso de playas).